Manhattan


MANHATTAN (1979)
Para nosotros, todas las películas de Woody Allen son una sesión psicoanalítica donde los diálogos y monólogos no son más que un análisis minucioso de los personajes y sus características humanas, a través del cual se expande la reflexión sobre la realidad social en todos sus matices (Televisión, escuela, intelectualismo, política, religión, ideologías, burguesía, etc...). Podemos hablar de las películas de Woody Allen incluso citando sus frases, porque al fin y al cabo en sus películas habla mucho de sí mismo y no se ahorra ninguna crítica: "Sufrió ataques de ira, de paranoia liberal-judía, de chauvinismo masculino, de misantropía farisaica, de obsesiones y postraciones nihilistas, de una continua queja de la vida sin intentar jamás encontrar una solución. Anhelaba ser artista pero evitaba los sacrificios necesarios para serlo. En sus momentos más íntimos hablaba de la muerte, alcanzando cotas de tragedia que en realidad era mero narcisismo." Así lo describe su exmujer Jill en su libro autobiográfico durante la película.
En sus películas, Woody siempre busca desesperadamente algo auténtico, incluso diríamos casi sagrado, en lo que creer y por lo que valga la pena vivir. Por tanto, no es casualidad que el amor sea el eje alrededor del cual teje la red de todos sus personajes.
Manhattan no es sólo un distrito de Nueva York sino que en esta película es una metáfora de una isla dentro de una gran ciudad, así como el hombre está dentro de la masa, por eso en el monólogo inicial mientras se describe Manhattan también se puede leer lo que es el ser humano: una isla llena de neurosis que se enfrenta al colapso de los valores en busca del amor. Así que a pesar de todo habla de una sociedad cada vez más corrupta, degradada, falsamente intelectual, construida e hipócrita, al borde del abismo, luego sabe convertir toda esta podredumbre en una flor romántica que crece entre la basura cuando dice adorar, aun màs de "idolatrar inconmensurablemente" a esta ciudad y a su gente que en medio de sus miserias humanas no desea nada más que ser amado.

7 PERSONAJES CLAVES EN MANHATTAN
Manhattan es una comedia romántica con una trama muy simple, pero normalmente son las cosas simples las que se complican cuando no sabemos cómo vivirlas tal como son. Nos gusta ver en esta película 3 parejas o islas, como Manhattan, y un puente: Isaac y Tracy, él es un autor de televisión de 42 años muy culto pero no especialmente talentoso con dos divorcios a sus espaldas, pero tiene una relación con Tracy, una chica de 17 años que está realmente enamorada de él o quizás de su inteligencia. Luego está el matrimonio de Yale, el mejor amigo de Isaac, un profesor de literatura y su esposa Emily, un matrimonio sólido en el óxido porque el tiempo ha hecho que se den por sentado el uno para el otro y, finalmente, la pareja de Jill, ex esposa de Isaac y su su pareja Connie, la razón por la que dejó el matrimonio descubriendose lesbiana. Y por último está Mary, una periodista divorciada y símbolo del esnobismo intelectual neoyorquino. María tiene un carácter fuerte pero sufre de inestabilidad emocional; tiene una cultura pomposa pero infructuosa (según Isaac, escribe cosas que no son originales y por tanto no dignas de su inteligencia), a la mujer le encanta dar definiciones críticas y juzgar. Mary es el puente de Queensboro que conecta Manhattan con el continente de las otras parejas, pues inicialmente ella es la amante de Yale pero lo deja porque necesita estabilidad y él no quiere dejar a su esposa Emily, en cambio Isaac deja a Tracy, porque ella es demasiado joven e insignificante para sus investigaciones intelectuales y se enamora de Mary, quizás debido a la misma inestabilidad emocional que tienen los dos. La historia de la película no es la de Yale e Isaac peleándose por una mujer: al contrario, es Yale quien aconseja a Isaac de salir con ella. Es la historia de las relaciones entre personas que pasan (como un puente) unas de otras y a través del otro, o con el otro o más bien incluso sin el otro cuando los dejas y los abandonas. Pero cuando Yale decide dejar a su esposa, Mary deja a Isaac y regresa con Yale. Son como pasajes del puente de Manhattan, un ir y venir de emociones, demuestran cómo bajo el puente fluye agua o sentimientos inconscientes o desconocidos para nosotros. De hecho, cuando Mary deja a Isaac, èl corre como un atleta para alcanzar a Tracy en el aeropuerto, ella está a punto de partir hacia Europa e Isaac retira todas sus palabras, su filosofía, sus sabios consejos y resulta mediocre (primero la deja porque quiere que ella sea libre y tenga otras experiencias y luego quiere atarse a ella por miedo que tales experiencias la cambien), se muestra cobarde y egoísta en el amor (no la busca tanto por ella sino para sí mismo), suplicando una vez más el regreso de Tracy, mientras ella se demuestra, con una frase, una mujer madura que acaba de cumplir 18 años y esta es la lección de vida que Tracy le imparte a Isaac quien pensó que 6 meses lejos de él la habría cambiado: "Mira, seis meses no es mucho... Y no es que todos se arruine... Hay que tener un poco de fe, ya sabes, en la gente".
Todas las películas de Woody Allen podrían enmarcarse en una de sus frases de la película "Crímenes y pecados": Es muy, muy difícil conseguir que el corazón y el cerebro estén de acuerdo. Imagínate que en mi caso ni siquiera se hablan.

L'AMORE INFANTILE DI WOODY ALLEN
In molti casi i personaggi di Woody Allen si intrecciano con la sua vita reale. Nel film Manhattan Isaac di 42 anni confessa ai suoi amici di avere una relazione con Tracy che ha diciassette anni e di essere più vecchio del padre. L'intera relazione con Tracy, peraltro probabilmente ispirata alla vera relazione che Allen ebbe con l'attrice Stacey Nelkin, anche se poi un altra donna, la modello  Babi Christina Engelhardt  ha confessato di aver avuto una storia con Allen quando lei aveva appena 16 e lui 41. 
Nel film con Tracy lui si dimostra un uomo maturo che vuole soltanto svezzare questa ragazza da quella immensa tetta chiamata passione sessuale e basta, quindi senza impegni, senza compromessi, senza legami: "Pensa a me come a una deviazione sull'autostrada della vita" diceva Isaac, quindi voleva essere una semplice e sporadica parentesi nella sua vita. Ma non aveva previsto che una ragazza a quell'età s'innamora davvero, mentre lui vuole essere solo un momento di passaggio, lei invece con amore genuino ed innocente pensa ad una storia importante. Lui incita Tracy a fare altre esperienze e la lascia, ma quando resta solo (senza Mary che l'aveva lasciato), corre senza fiato da lei e la vuole indietro, quindi senza contare con i progetti che lei aveva fatto di andare a studiare a Londra. Qui Isaac si dimostra infantile, ha perso la sua bambola e corre a riprendersela con la paura che lei in un nuovo ambienti conosca altri orizzonti più normali e consoni alla sua età. La ragazza che spesso lui aveva scherzosamente denominata  una che “deve fare i compiti” (vale a dire una ragazzina liceale) alla fine del film lei consegna a lui un compito vitale per il suo bambino interiore non ancora cresciuto: Credere nelle persone e quindi anche in se stesso.

Yale: Eres muy presuntuoso, ¿sabes? Quiero decir, solo somos personas. Somos sólo humanos, ¿sabes? Crees que eres Dios.
Isaac: "Tendré de alguna manera que inspirarme en algún modelo"

Isaac: ¿Cuántas veces puedes hacer el amor en una noche?
Tracy: Mucho.
Isaac: Sí, lo noto. Vaya... Mucho es mi número favorito.

Isaac: ¿Qué tipo de perro tienes?
María: Lo peor.
Isaac: ¿en serio?
María: Es un perro salchicha. Sabes, es un reemplazo de pene para mí.
Isaac: Oh, en tu caso habría pensado en un gran danés.


Isaac: Tú también confías en tu cerebro. Mira, creo que el cerebro es el órgano más sobrevalorado.

Yale: El chisme es la nueva pornografía

¿No te basta con tenerme cerca, tu amor por mí siempre tiene que expresarse sexualmente? ¿Qué pasa con otros valores como la dulzura, el contacto espiritual… ¿Está bien en un hotel?
- Mary -

Tracy: Hagámoslo de alguna manera extraña que siempre quisiste hacer pero que nadie quiso.
Isaac: ¡estoy en shock! ¡Pero qué clase discurso para una niña de tu edad!
Tracy: ¿Y que tiene de malo?
Isaac: ¡Entonces tomaré mi equipo de buceo y te lo mostraré!

Soy anticuado, no creo en las aventuras extramatrimoniales:
Creo que deberíamos aparearnos de por vida, como las palomas o los católicos.
-Isaac-

Isaac: Cada vez que vengo aquí, no puedo entender cómo puedes preferirla a mí. (Habla de Connie, la nueva pareja de su ex esposa).
Jill: ¿No puedes entenderlo?
Isaac: No. Es un misterio para mí.
Jill: Bueno, conocías mi historia cuando te casaste conmigo.
isaac: Lo sé. Mi analista me advirtió, pero eras tan hermosa que cambie de analista.

¡No me mires así con esos ojos tan grandes! ¡Jesús, pareces uno de esos niños descalzos de Bolivia que buscan adopción!

Hace años escribí una historia sobre mi madre, titulada "La sionista castradora".
-Isaac-

Mary: Estaba cansada de sumergir mi identidad en un hombre muy brillante y dominante. Es un genio.
Isaac: Oh, de verdad, él era un genio, Helen es un genio y Dennis es un genio. Conoces a muchos genios, ¿sabes? Deberías conocer gente estúpida de vez en cuando, ya sabes, podrías aprender algo.


UNA LUZ AL FINAL DEL TÚNEL
A pesar de todo, la visión de esta película es inicialmente consciente de todo el mal que existe, de todas las ideologías ilusorias que nos rodean y de las que quizás también somos portadores, hay un fragmento de tiempo donde el protagonista Isaac se pregunta, en medio de lo absurdo de la vida, también de la belleza intrínseca de las cosas por las que vivimos. Por lo tanto, incluso en la visión pesimista de su autor, en la que está claro que las cosas son así, que no hay sentido, nada en qué creer, en la banalidad fundamental del universo, en una sociedad cada vez más corrupta, degradada y falsamente intelectual, artificialmente construida e hipócrita, al borde del abismo... aquí Isaac hace la pregunta existencial "¿Por qué vale la pena vivir? Es una excelente pregunta" y una lista de las pequeñas cosas por las que luchar para poder vivir son: Un comediante (El viejo Groucho Marx), un jugador de béisbol (Willie Mays), una pieza de una sinfonía de Mozart (Júpiter), una canción de Louis Armstrong (Potato head blues), algunas películas suecas (refiriéndose a las películas de Ingmar Bergman), por supuesto, una novela (Flaubert Educación Sentimental), un actor (Marlon Brando), un cantante y actor (Frank Sinatra), un cuadro (Esas increíbles manzanas y peras pintadas por Cézanne) y los cangrejos en un restaurante (de Sam Wu). Finalmente piensa de nuevo y agrega a la lista el rostro de su amada (Tracy).
Es aquí donde el corazón prevalece sobre la cabeza, en el razonamiento epidémico de los personajes que pululan las películas de Woody Allen, quienes, como él mismo señala en una escena, afirma: "Constantemente se crean problemas verdaderamente inútiles y neuróticos porque esto les impide abordar uno de los problemas universales más insolubles y aterradores"


No me enojo, ¿vale? Tiendo a internalizar, no sé cómo expresar el enfado. ¡Es uno de los problemas que tengo! En lugar de eso, crío un tumor por dentro.


¿Tienes hijos? - ¿Yo? Sí. Tengo un hijo que ahora está siendo criado por dos mujeres. - Creo que eso es bueno. Leí un artículo en una publicación psicoanalítica. No necesitas un hombre. Dos madres son perfectas. -Siempre he creído que muy pocos sobreviven a una madre.

LA BELLEZA SALVARÁ AL MUNDO
Una frase memorable de Dostoievski que resume la pobreza humana en su libro “El idiota” es que a pesar de todo el mal que siempre parece prevalecer sobre nuestra naturaleza, siempre está la belleza de las cosas que siembran esperanza por todas partes, serà la belleza la que nos salvarà. En la película Manhattan de Woody Allen queda claro cómo el autor se inspira en esta esperanza al utilizar el arte como medio introspectivo para buscar una razón de salvación. De hecho, Isaac lo afirma cuando dice: “Creo que la esencia del arte es brindar a las personas una manera de abrirse paso, para que puedan entrar en contacto con sentimientos que no sabían que tenían. Creo que el talento es suerte, lo importante es que haya coraje en la vida" y es precisamente el coraje lo que les falta a muchas personas para emprender el viaje a lo más profundo de su inconsciente para conocerse a sí mismos y descubrir la belleza que podrìa salvarnos de nosotros mismos. 

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